Si no hay magia, que no haya nada

Te vi en la calle un día y algo me llamó
El vislumbre fugaz de una mirada.

Como iba casi corriendo
Recién en la esquina frené
Paré a pensar si eras vos
Si volvía, si te hablaba
O si estaba llegando tarde.

Seguí corriendo 
Porque los tiempos de hoy
Impulsan a seguir
Y te hablé más tarde
Porque seguí acordándome de vos.

Varias veces intenté que me busques 
Y te seguí buscando para eso
Sin lograr mi cometido
Sin cometer excesos de ningún tipo.

El destino te trajo solito 
Y nos tomamos unos tragos como amigos
Me acompañaste a tomar el colectivo
Y yo te miraba 
Practicando no decir lo no dicho
Te miré fuerte con ojos que ni veías 
Pensabas en no cagarla
¿Pero querías?

Me fui tranquila
Algo decepcionada
Un poco contenta por corroborar
Que ahí había algo más.

Después de hablar una banda
De rozarnos al descuido
De mirarnos y de que me gustes 
De sentir conexión profunda
Me fui metiendo en tu vida
A veces pidiendote ayuda
A veces preocupada por tus cosas
Escuchándote, hablándote.

Un día fui a tu casa
Me invitaste como si nada
Aunque en realidad 
En la otra punta de la mesa te fuiste a sentar
Muy de a poco te acercaste
Al final no podías dejarme de abrazar
Qué energético se sintió todo ese cariño
No sé si te gusto
Ni sé si me gustás
Pero siento que te quiero.

Qué rara me sentí anoche
Cuando fui a tu casa y estaban 
Tu hijo y su mamá
Y eran una familia tan convencional
Que me aburría de solo verlos
Y me fui pensando
(Y en mi mente me iba corriendo)
Que si no hay magia, que no haya nada.

Comentarios

Entradas populares