Objeto de deseo

Practico ser objeto de deseo y me dejo observar por vos.

Primero desde el espejo, con ganas crecientes.

Ves la sensualidad que brota por cada poro de mi piel y que te transmito con sutileza mientras espero mi café.

Sonreís con satisfacción y picardía cuando pido el café negro porque intuís que no voy a medias tintas ni corto el café con leche, ni lo endulzo con nada, ni lo dejo enfriar.

Obvio se te cae la llave, justo al lado de mis piernas y te tenés que agachar. 

Sin mover un músculo me relojeás. 

En alguna especie de ritual mamífero, te levantás la remera, me mostrás que tu cuerpo está fuerte, que te ejercitás.

Sin mover ni un ápice la pupila, te observo callada, bebiendo, con cara sensual.

Mis labios actúan solos, por las dudas me voy. 

En un segundo me imagino que te meto en un hotel y te doy.

Pero por las dudas..

Me voy.

Salgo a mirar la lluvia y me seguís. Te quedás al lado mío y no sabés que decir.

Yo practico ser objeto de deseo.